Susurro del Cielo: 7 Versículos para Una Semana en Victoria. (No. 9) ¡Nuevo!!

Una persona diligente se define en tres palabras: comprometida, fiel y exitosa.

“El que hace bien su trabajo, estará al servicio de reyes y no de gente insignificante.” Proverbios 22:29

La verdad es gratuita, pero todo el mundo estaría dispuesto a pagar grandes cantidades de dinero por escucharla.

“Los reyes aman y ven con agrado a quien habla con honradez y sinceridad.” Proverbios 16:13

Dios está pendiente de ti, sabe tus alegrías y tristezas, de tus lágrimas en la soledad, como de tus triunfos, conoce tus debilidades y te ayuda a mejorar, premia tu esfuerzo y recompensa tu amor.

“Anota en tu libro todas las veces que he huido; tú bien sabes las veces que he llorado. Cuando yo te pida ayuda, mis enemigos saldrán huyendo. Yo estoy seguro, Dios mío, que cuento con tu apoyo.” Salmos 56:8-9

No te canses de demostrar que eres un Hijo de Dios, cada momento, con cada acto y cada palabra, que las personas se den cuenta que eres diferente y deseen conocer cuál es tu secreto.

“Por lo tanto, no te avergüences de hablar bien de nuestro Señor Jesús. Tampoco te avergüences de mí, que estoy preso por servir a Jesucristo. Al contrario, tienes que estar dispuesto a sufrir por anunciar la buena noticia. ¡Ya Dios te dará las fuerzas necesarias para soportar el sufrimiento!” 2ª Timoteo 1:8

La fe transforma lo imposible en posible.

“Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.” Sn. Marcos 9:23

Una mujer puede ser deseada o amada. Si se preocupa más por su exterior probablemente sea muy deseada; pero si predomina su belleza interior tendrá una gran estima.

“Que el adorno de ustedes no sea de cosas externas, como peinados exagerados, o con joyas de oro y vestidos lujosos. La belleza no depende de las apariencias, sino de lo que hay en el corazón. Así que, sean ustedes personas tranquilas y amables. Esta belleza nunca desaparece, y es muy valiosa delante de Dios.” 1ª Pedro 3:3-4

Las palabras reflejan nuestros pensamientos y además, son nuestra carta de presentación a los demás.

“No digan malas palabras, sino sólo palabras buenas que edifiquen la comunidad y traigan beneficios a quienes las escuchen.” Efesios 4:29