Un hijo necesita guía y dirección para que cuando llegue el momento de
elegir su propia forma de vida, siempre recordará los valores y el ejemplo que
sus padres le han dado.
"Educa a tu hijo desde niño, y
aun cuando llegue a viejo seguirá tus enseñanzas.” Proverbios 22:6
La mejor ofrenda a Dios no consiste en lo ostentoso, en apariencia, ni en
la cantidad, sino en la sinceridad con que se presenta.
“Cada uno debe dar según lo que haya
decidido en su corazón, y no de mala gana o a la fuerza, porque Dios ama al que
da con alegría.” 2ª Corintios 9:7
Cada cierto tiempo realice un FODA personal y espiritual, concéntrese en
sus fortalezas, aproveche las oportunidades, trabaje sus debilidades y enfrente
sus amenazas. No olvide que examinarse cada día es parte importante del desarrollo
de una vida conforme al corazón de Dios.
“Corrige tu conducta, afirma todas
tus acciones. Por nada de este mundo dejes de hacer el
bien; ¡apártate de la maldad!” Proverbios 4:26-27.
Lo que vive en este momento (pérdidas, victorias, tristeza) tiene un
objetivo: puede vigorizar su fe, mejorar su carácter o comprobar su fidelidad.
Dios le ha puesto en el lugar y la hora indicada para que tome la decisión de
seguir adelante, de ser mejor cada día. No olvide que Dios tiene un propósito
para su vida y Él lo cumplirá.
“Dios mío, tú cumplirás en mí todo
lo que has pensado hacer. Tu amor por mí no cambia,
pues tú mismo me hiciste. ¡No me
abandones!” Salmos 138:8
No busque a Dios por lo que puede darle, entréguele su vida, su servicio
y sus fuerzas porque lo ama hasta con el último aliento de su ser.
“Dios mío, tú eres mi Dios. Con ansias te busco
desde que amanece, como quien busca
una fuente en el más ardiente desierto.” Salmos 63:1
Cualquier objeto, persona o forma de entretenimiento que toma el primer
lugar de tu corazón, se convierte en tu ídolo y terminará alejándote del Señor.
No permitas que tu hogar sea un centro
de idolatría, porque Dios lo aborrece.
“Pero a los que sigan adorando a esos ídolos odiosos, y no se
aparten de sus repugnantes maldades, yo les pediré cuentas de su conducta. Yo
soy el Dios de Israel, y cumpliré mi palabra.” Ezequiel 11:21
No te frustres por los fracasos del presente... esto también pasará. No
vivas del éxito actual... esto también pasará. Vive la vida con el recordatorio
de Quién está al mando y a Quién le perteneces.
“Cuando te vaya bien, disfruta ese
bienestar; pero cuando te vaya mal, ponte a pensar que lo uno y lo otro son
cosa de Dios, y que el hombre nunca sabe lo que ha de traerle el futuro.” Eclesiastés 7:14
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