Los imprevistos y las vueltas de la vida tienen una manera de recordarnos que aquí no estamos en casa.
Esta no es nuestra tierra.
No estamos familiarizados con el lenguaje de la enfermedad y la muerte. La cultura confunde el corazón, el ruido interrumpe nuestro sueño, y nos sentimos lejos de casa. Y, ¿sabe que? Eso está bien.(Tomado de Aligere su equipaje, Max Lukado)
Recuerda como confiaba en su padre en su niñez, uno no sabía si regresaría, pero reconocía que si ibamos con nuestros padres regresaríamos a casa y estaríamos seguros. Con Dios es igual, una vida difícil, compromisos delicados, pérdidas de dinero, traición y desencanto, pero hay una promesa al día de hoy y para mañana:
PROMESA PARA EL DÍA DE HOY:
"y yo estaré con vosotros TODOS los días hasta el fin del mundo.." Mateo 28:20 entonces porque voy a temer lo que sucede hoy.
PROMESA PARA EL FUTURO:
"no te dejaré ni te desampararé:" Hebreos 13:5, el día de mañana el estará contigo, sólo quedate cerca de Él, no te alejes, aunque parezca atractivo o interesante, recuerda que él tiene TODO bajo CONTROL.
Bendiciones
Saludos
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