La verdad, «más valen dos que
uno», porque sacan más provecho de lo que hacen. Además, si uno de ellos se
tropieza, el otro puede levantarlo. Pero ¡pobre del que cae y no tiene quien lo
ayude a levantarse! Y también, si dos se acuestan juntos, entran en calor; pero
uno solo se muere de frío. Una sola persona puede ser vencida, pero dos ya
pueden defenderse; y si tres unen sus fuerzas, ya no es fácil derrotarlas.
Eclesiastés 4:9-12 TLA
Estos versículos escritos por Salomón,
se convierten en el manifiesto de la unidad y detalla la importancia de la
unión, del compañerismo y de trabajo en equipo, los cuales se pueden desglosar
así:
a) La sinergia multiplica los resultados y reduce los esfuerzos:
Cuando nos unimos bajo un mismo objetivo y una
visión en común, los resultados crecen exponencialmente y el esfuerzo se
comparte entre todos los miembros del equipo.
b) Existe un apoyo perpetuo entre todos los miembros del equipo:
Cuando un grupo de personas convierte sus
expectativas personales en vínculos y lazos afectivos fuertes, pasa a ser un
equipo e incluso una familia. En ese sentido, nadie deja que otro miembro
pierda sin antes ayudarle, se caiga sin ayudarle a levantarse. Es donde realmente
se vive la empatía y la cercanía.
c) Se potencian las fortalezas y se minimizan las debilidades.
Los equipos se construyen en base a las fortalezas.
Lo mejor de uno de sus miembros mejora a todo el equipo y las debilidades,
disminuyen porque todos se hacen mejores entre sí. La visión compartida los
hace crecer y enfocarse en lo mejor de cada uno, construyendo la excelencia.
d) Se multiplican las fuerzas.
Cada vez que se une un equipo se logra mejorar y
las victorias se alcanzan más rápidamente. Ya no es la suma de las
individualidades, sino la multiplicación de la armonía, la cercanía y el equipo
de trabajo.
La formación de equipos permite destruir
estructuras piramidales y jerarquías que pueden destruir la unión. Cuando un
equipo crece se forma una estructura que se puede denominar "la mesa
redonda". Usada en las historias del Rey Arturo, está mesa tenía la
particularidad de no tener cabeza, donde todos podían opinar, discutir y
plantear otras situaciones que permiten lograr el bienestar del equipo.
Destruye los síndromes de “estrellato” y minimiza
el factor negativo que establecen las individuales por constituir un solo cuerpo,
con diferentes funciones pero con un solo objetivo.
De tal forma, que estos 5 grandes ejes del trabajo
en equipo permitirán lograr mejores resultados y se debe luchar contra aquellos
factores que tratarán de derrotar la unión, tales como: búsqueda del
estrellato, desunión, mentiras, entre otras, tal como nos recuerda esta
historia entre cuatro bueyes y un león:
4 bueyes, que pastaban en
los alrededores de un prado, se juraron eterna amistad.
Así pues, cuando un león
les atacó, se defendieron tan bien que la fiera emprendió una fuga veloz.
El león, viendo que esta
unión de los bueyes lo privaba de comérselos, comenzó a hacer uso de la
intriga.
Buscó a cada uno por
separado y le dijo que los otros hablaban muy mal de él.
Así, creó sospechas entre
los bueyes y su amistad fue rota para siempre. Luego el león, viéndolos
enemistados, los fue matando uno tras otro. Pero el último buey, antes de
morir, exclamó:
– ¡Nosotros tenemos la
culpa de esta desgracia! Por dar crédito a los enredos del enemigo nos
desunimos, y así le fue fácil destruirnos.
2 Comentarios
gracias por tan bonita enseñanza
ResponderEliminarexcelente enseñanza. gracias por compartir
ResponderEliminarManda tus comentarios del blog, puedes escribir tus testimonios, o historias que desees.