Haz lo correcto.
“Daniel decidió no comer ni
beber lo mismo que el rey, porque para él eso era un pecado. Por eso le pidió a
Aspenaz que no los obligara a pecar ni a él ni a sus amigos, comiendo esos
alimentos.” Daniel 1:8 TLA
Este
principio para tener una vida mejor es una de los más complicados porque se
debe realizar un examen personal sobre nuestros actos y emociones. Hacer lo
correcto es una decisión que no se toma al instante, es una resolución para
tener un estilo de vida acorde a las normas establecidas, limitando nuestras
acciones basadas en evitar dañar, usar y manipular a nuestros semejantes. Hay
una máxima que establece: “los derechos inician donde finalizan mis deberes y
los derechos de los demás.” Benito Juárez, un ex presidente mexicano dijo: “El
respeto al derecho ajeno es la paz.” Jesús nos dejó un estándar sobre lo
correcto y lo incorrecto: “Al que cuida bien lo que vale poco, también se le puede
confiar lo que vale mucho. Y el que es deshonesto con lo de poco valor, también
lo será con lo de mucho valor.” Sn. Lucas 16:10 TLA
Hay
muchos hombres que hicieron lo correcto. Daniel es un ejemplo claro. Sus
valores no le permitían comer alimentos que se habían ofrecido a los ídolos,
tomó una decisión complicada pero valiosa. Sus tres amigos Azarías, Misael y
Ananías también tuvieron una prueba de su rectitud al establecerse una ley que
debía cumplirse, sino traía la muerte en un horno de fuego. Los tres amigos
contravinieron la ley y pagaron las consecuencias, pero Dios los libró. En
verdad son esos momentos de presión los cuales desnudan nuestras verdaderas
intenciones. Estar contra la pared prueba realmente que tan altos o bajos
pueden ser nuestros estándares. Es un examen personal. Una decisión que se basa
en que tan importante es para nuestra vida lo bueno y lo malo. Aunque el mundo
trate de relativizar estos dos términos, siguen siendo tan antagónicos como la
luz y la oscuridad, lo sucio de lo limpio, lo despreciable de lo virtuoso.
Alguien dijo una vez: “Lo aceptado, no siempre es lo
correcto y lo correcto no es siempre lo aceptado”. Muchos serán tildados de
mente cerrada por no tolerar lo que hace todo el mundo. Muchos serán insultados por sus valores y la
firmeza de los mismos. Sin embargo es importante no moverse de lo correcto.
Salomón escribió dentro de sus proverbios: “No cambies de lugar los linderos
antiguos que establecieron tus antepasados.” Proverbios 22:28 NVI. No te dejes
llevar por la corriente, Dios siempre mantendrá sus estándares altos y no los
moverá según las revoluciones o movimientos que existan. Es por ello que Pablo
nos recomienda: “No vivan ya según los criterios del tiempo presente; al
contrario, cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y
lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que le es
grato, lo que es perfecto.”
Los
beneficios de hacer lo correcto son muchos y jamás te dejará burlado. Podrán
destruir tu cuerpo, pero jamás podrán decir que encontraron una falta en ti.
Eso es lo bello de lo correcto, que te ayuda a construir un buen nombre y
glorificas a Dios. Ahora bien, es necesario tratar y ejercitarse para siempre
ser honesto, leal, cortés, obediente y decente y la mejor forma es contestando
esta pregunta:
¿Cómo puedo hacer lo correcto?
1.
Cuidando nuestras palabras:
“No digan malas palabras. Al
contrario, digan siempre cosas buenas, que ayuden a los demás a crecer
espiritualmente, pues eso es muy necesario.” Efesios 4:29 TLA
En promedio,
los seres humanos hablamos 14,000 palabras por día. De esa cantidad es
importante delimitar las mentiras, las ofensas, las humillaciones, lo obsceno,
entre otras, para saber si en realidad nuestro vocabulario es acorde a una
persona de integridad. Muchas veces nos encargamos de destruir la estima de
otros con palabras altisonantes, humillamos a los demás tratando mal y usando
palabras deshonestas que solo ultrajan a otros. Nuestras palabras deben ser “sazonadas
con sal” es decir, deben ser prudentes y capaces de generar vida a los que
están a nuestro alrededor.
2.
Cuidando nuestra conducta:
“Tú mismo tienes que ser un
buen ejemplo en todo. Enséñales a hacer el bien y, cuando lo hagas, hazlo con
seriedad y honestidad.” Tito 2:7
Nuestros hechos hablan más que las
palabras y tiene un impacto mayor en la vida de otras personas, por eso, el
hacer lo correcto es un examen de nuestro carácter y es el resultado de lo que
hay en nuestra mente. Una buena conducta se logra al ser respetuoso con los
demás, tener un alto sentido de responsabilidad, ser prudente y estimar a todos
por igual. Debemos revisar nuestros hábitos e identificar aquellos que pueden
provocar que la tentación nos venzan y fallemos a Dios y a nuestro prójimo.
3.
Teniendo pasión y determinación:
“Pero,
aun si no lo hiciera, sepa bien Su Majestad que no adoraremos a sus dioses ni
nos arrodillaremos ante la estatua de oro.” Daniel 3:18
Para hacer lo correcto debemos
tener valores firmes y atemporales, y estos, deben ser llevados a la práctica.
Martin Luther King dijo: “Siempre es el momento apropiado de hacer lo correcto”
Todo esto debe ser llevado a una decisión de que ante una disyuntiva, siempre
se hará aquello que es conforme a lo ético y moral.
4.
Siendo ejemplo de fe:
“Este mundo no era
digno de ellos. Vagaron por desiertos y montañas, se escondieron en cuevas y
hoyos de la tierra. Debido a su fe, todas esas personas gozaron de una buena reputación,
aunque ninguno recibió todo lo que Dios le había prometido.” Hebreos 11:38-39
NTV
Más
del mil millones de personas se declaran
cristianas en todo el mundo. Por lo cual nuestra fe está basada en valores
espirituales que invitan a amar, respetar a nuestro prójimo, perdonar. Jesús dijo
en su maravilloso sermón del monte:
“»Han oído la ley que dice que el
castigo debe ser acorde a la gravedad del daño: “Ojo por ojo, y diente por
diente”. 39 Pero
yo digo: no resistas a la persona mala. Si alguien te da una bofetada en la
mejilla derecha, ofrécele también la otra mejilla. 40 Si
te demandan ante el tribunal y te quitan la camisa, dales también tu abrigo.
41 Si un soldado te exige que lleves su equipo por un kilómetro,
llévalo dos. 42 Dales a los que te pidan y no des la espalda a quienes te pidan
prestado.” Sm.- Mateo 5:38-42 NTV. Estas y otras fabulosas enseñanzas resumen
el valor de la conducta cristiana. El ejemplo está en tus manos.
... continuará...
2 Comentarios
Puede que nos sirva si lo lees
ResponderEliminarPara ti Dios te Bendiga
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