Susurro del Cielo: 10 Preceptos para Vencer Los Obstáculos.

10 Preceptos para Vencer Los Obstáculos.

Los obstáculos, limitaciones o dificultades tienen el tamaño que nosotros le damos. Si los observamos con miedo, parecerán gigantescos. Si se ven desde la óptica de una experiencia de aprendizaje, su nivel de dificultad se mantendrá, pero si los desafiamos con determinación, serán más fáciles de vencer. Siempre habrá un esfuerzo. Siempre habrá sudor y trabajo duro. La diferencia estará que mientras el miedo te paraliza, el ser determinado te ayudará a enfrentarte, perder algunas batallas y aprender, reaprender y a que esas experiencias te lleven a la victoria.

Estos preceptos no son pasos fáciles, no son atajos, mucho menos simplificaciones de lo que debes hacer. No saldrás rápido, si los tomas en cuenta. No evitarán los obstáculos; pero si te sostendrán cuando la tormenta arrecie. Te ayudarán a levantarte ante el enésimo intento. Te fortalecerán la fe, en medio del temor y la desesperanza.

Recuerda lo que Dios habló a través de Isaías, su profeta:

“Cuando pases por aguas profundas, yo estaré contigo.

Cuando pases por ríos de dificultad, no te ahogarás.

Cuando pases por el fuego de la opresión, no te quemarás; las llamas no te consumirán.” Isaías 43:2 NTV.

En cada declaración hay dos situaciones. Pasaremos por las aguas profundas de los problemas, los ríos de dificultad, el fuego de la opresión. Es una materia ineludible. No podremos saltárnoslas y pasarlas después. La tormenta caerá. La crítica arreciará. El dolor continuará. Sin embargo, Dios hará su parte. Estará allí. No mirará de lejos. No estará pendiente cuando lo necesitemos. No enviará a su ángel. No. Él mismo estará allí. Mientras la corriente del río exija mayor fuerza, Dios nos brindará fuerzas vitales (Números 24:8) para salir. Mientras el fuego este puliendo el carácter, Él será quién sabe cuánto necesitamos y cuando termina el proceso (Job 23:10).

Así que, cuando veas el obstáculo enfrente, revisa Quién te acompaña, toma su mano y déjate guiar, pero debes dar el primer paso. Eso se llama fe.

Precepto No. 1:

Pierda el temor por caminar solo por la vida. Cambie su relación con Dios, que no solo sea su Creador, el Ser Superior; sino que sea su Señor, Su Consolador. Tómese de su mano y avance en medio del bosque, disfrutando Su Presencia, Su Compañía. Esto exigirá mejorar muchas áreas de su vida, pero todo será un camino complicado, pero agradable.

“Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.” 1ª. Juan 4:4 RVR1960

Precepto No. 2:

No pierda de vista su propósito en la vida. Lograr enfocarnos en lo importante, nos ayudará a ver la dimensión natural de los problemas que enfrentemos. Muchos obstáculos son “molinos de viento” que parecen dragones o bestias que sólo nos quieren apartar del plan de Dios para nuestra vida, pero al verlos con la visión correcta, podremos atravesarlos sin ningún inconveniente.

“Pero los otros que habían ido con él empezaron a desanimar a los israelitas diciéndoles que el territorio era malo. — ¡No lo hagan! —les decían—. ¡No podremos vencer a gente tan poderosa! ¡Los que viven allí son gigantes, como Anac! ¡Ante ellos nos veíamos tan pequeños como grillos! Además, es un lugar en donde no se puede vivir. Es tan malo que la gente se muere como si se los tragara la tierra.” Números 13:32-33 TLA

Precepto No. 3:

Los obstáculos siempre estarán frente a nosotros mientras no tratemos de enfrentarlos. Las noches serán más largas. Las respuestas no vendrán según nuestras necesidades. La dificultad llegará acompañada siempre de la ansiedad y el estrés. Desarrollar una estrategia clara, identificar las causas y tomar la decisión firme de atravesar por ella, nos hará que al final sea una anécdota más.

“Cuando Saúl y los israelitas oyeron lo que decía el filisteo, se desanimaron y les dio mucho miedo. Pero el filisteo siguió provocando a los israelitas mañana y tarde, durante cuarenta días.” 1ª Samuel 17:15-16 TLA

Precepto No. 4:

Acepta el desafío que te propone el problema. Goliat desafío a un ejército a pelear cuerpo a cuerpo por la victoria. David tomó el desafío y en menos de 5 minutos ya teníamos un ganador. Superar ese abuso. Manejar finanzas débiles. Cuidar a una persona en su enfermedad. Una depresión. Todo esto y más, nos desafía día a día, no roba tiempo y esfuerzos. Sólo yendo a una pelea cara a cara, sabremos qué tan fuertes somos y que tan fortalecidos saldremos de esa batalla.

“Añadió David: Jehová, que me ha librado de las garras del león y de las garras del oso, él también me librará de la mano de este filisteo. Y dijo Saúl a David: Ve, y Jehová esté contigo.” 1ª Samuel 17:32 RVR1960

Precepto No. 5:

Da lo mejor de ti en medio del problema. Jacob trabajó 14 años de su vida por la mujer de su vida, con el agravante de tener un suegro estafador que siempre se aprovechó de él. José pasó 13 años como esclavo y preso donde no se dejó morir por las circunstancias. Hizo lo mejor que pudo y esto lo llevó al Palacio Real. David pasó varios años escapando de morir por los celos del rey Saúl, siendo fiel y respetando al Ungido de Jehová. Todo tiene un propósito, una razón. Dios no deja nada al azar. Disfruta tu proceso de formación, porque Dios desea usar tu vida.

“Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos.” Romanos 8:28 NTV

Precepto No. 6:

Utiliza las 3 P´s de la fe: Persevera. Persiste. Permanece.  La perseverancia será la firmeza que te permitirá mantenerte seguro que todo pasará y te dará fuerzas para enfrentar cada situación con gallardía. La persistencia será como la gota en la roca, mientras siga constante la romperá. La permanencia hará que tu fe sea inquebrantable.

“La fe es la confianza de que en verdad sucederá lo que esperamos; es lo que nos da la certeza de las cosas que no podemos ver.” Hebreos 11:1 NTV

Precepto No. 7:

No le tengas miedo al fracaso. Hay una enorme diferencia entre fracasar y ser un fracasado. Fracasado es quien se quedó en el suelo y no luchó por cambiar su estado. El fracaso no es lo que nos hizo caer, sino lo que no hicimos para levantarnos. Luego de las lágrimas, las quejas y lamentos, limpia todo y sigue hacia adelante.

“Hermanos, no digo que yo mismo ya lo haya alcanzado; lo que sí hago es olvidarme de lo que queda atrás y esforzarme por alcanzar lo que está delante. Filipenses 3:13 DHH

Precepto No. 8:

Cuida tus reacciones. Siempre que nos enfrentamos a un obstáculo hay resistencia, una reacción. Puede ser miedo, desesperanza, terror, desesperación, depresión, duda. Que esa reacción no se convierta en una actitud ante el problema, porque lo único que hará es hacernos caer.

“Así, aunque llenos de problemas, no estamos sin salida; tenemos preocupaciones, pero no nos desesperamos. Nos persiguen, pero no estamos abandonados; nos derriban, pero no nos destruyen.” 2ª Corintios 4:8-9

Precepto No. 9:

Recuerda las victorias pasadas. Recuerda las ocasiones que Dios te sacó del hoyo y te dio una nueva oportunidad. Esto energizará la fe y te dará convicción de que mañana será mejor, que la tormenta pasará, que todo tiene un principio y que tiene un final. El final que Dios desea. Max Lukado escribió: “No le pidas a Dios que haga lo que deseas, pídele que haga lo correcto.”

“Las usaremos para levantar un monumento conmemorativo. En el futuro, sus hijos les preguntarán: “¿Qué significan estas piedras?”. Y ustedes podrán decirles: “Nos recuerdan que el río Jordán dejó de fluir cuando el arca del pacto del Señor cruzó por allí”. Esas piedras quedarán como un recordatorio en el pueblo de Israel para siempre».” Josué 4:6-7 NTV

Precepto No. 10:

Celebra cada avance. Da gracias por y a aquellos que ayudaron a aligerar la carga. Toma las lecciones aprendidas y disfruta ver los milagros de Dios a todo color. Sé parte del milagro. Comparte tus luchas y ayuda a otros a luchar.

“Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos.” Salmos 40:2 RVR 1960.