¿Cómo Lograr un Año Victorioso?: Corre Tus Marcas. ¡nuevo! Parte No. 1 de 2




No hubo otro rey antes de él, que se convirtiese a Jehová de todo su corazón, de toda su alma y de todas sus fuerzas, conforme a toda la ley de Moisés; ni después de él nació otro igual.” 2ª Reyes 23:25 RVR1960.

Según la página Web oficial de Guinness World Records (www.guinnessworldrecords.es), desde su creación,  ha registrado más 40,000 récords distintos, entre los más serios como la persona más longeva, título que ostenta Jeanne Louise Calment con 122 años y 164 días, así como la persona con más récords batidos, que es Ashrita Furman que cuenta con más de 125 marcas mundiales. Otros muy curiosos, como el de Brian Spott que colocó la cantidad de ¡¡439 huevos de pie!! o John Evans que consiguió levantar un automóvil con su cabeza. Increíbles esfuerzos por mejorar. Luchas por marcar la historia. Por dejar un nombre y un legado. Dicha organización, cada año reciben miles de solicitudes para que muchos intentos logran ingresar a dichas marcas y dejar un legado para las posteriores generaciones, motivando a que luchen por romper dichos récords.

Correr las marcas. Dejar un legado. Inspirar a las nuevas generaciones. Provocar un cambio. Cambiar la sociedad. Nadar contracorriente. Hacerlo mejor. Mejorar continuamente. Esto debe hacernos crecer en la vida. No somos productos del azar. Hemos sido creados con un propósito. Una misión. Algo especial. Dios le dijo a Jeremías: “Te conocía aun antes de haberte formado en el vientre de tu madre; antes de que nacieras, te aparté y te nombré mi profeta a las naciones.” Jeremías 1:5 NTV. Dios llamó a Moisés para sacar de la esclavitud a los judíos. A Josué a conquistar la Tierra Prometida. David fue llamado a agrupar a 12 tribus semi-nómadas en un reino. Hicieron lo posible y sobrepasaron las marcas. Límites pasados que parecían una broma. Ellos se pusieron en la brecha y dieron lo mejor de sí, para hacer más.

Hay un rey, que no tenía el cártel de David como hombre de guerra, no tenía la familia más ejemplar, su reino no era el de antaño, tenía un pueblo más comprometido con sus deseos, que con seguir a Dios. Su nombre: Josías. El escritor del libro de los Reyes, al final de su reinado, lo describe de la siguiente manera: “Nunca antes hubo un rey como Josías, que se volviera al Señor con todo su corazón, con toda su alma y con todas sus fuerzas, obedeciendo todas las leyes de Moisés. Desde entonces nunca más hubo un rey como él.” 2ª Reyes 23:25 NTV.

Marcó el estándar. Hubo reyes más poderosos, más ricos, más conquistadores, pero fue el único descrito con estas palabras: “Nunca antes hubo…”, “Nunca más hubo un rey como él.” Marcó el pasado y redefinió el futuro. Sobrepasó las expectativas. Dio un golpe de timón. Cumplió su propósito, dio la milla extra y salvó a toda una generación.

¿Qué podemos aprender de la vida de Josías?, ¿Cómo podemos quebrar marcas de nuestros antepasados?, ¿Cómo sobresalir positivamente, en medio del caos, desorden y destrucción? Esto implica una decisión personal: dejar la zona de comodidad, enfrentarse al cambio y motivarse a salir adelante. Para correr nuestras marcas debemos:

a)      Colocarnos una meta:
A los ocho años de su reinado, siendo aún muchacho, comenzó a buscar al Dios de David su padre; y a los doce años comenzó a limpiar a Judá y a Jerusalén de los lugares altos, imágenes de Asera, esculturas, e imágenes fundidas.” 2ª Crónicas 34:3

Napoleón Hill dijo: “Una meta es un sueño con fecha de entrega.” Además, las metas son aquellas que tienen destino determinado pero que nos dejan con insatisfacción, haciéndonos buscar nuevos riesgos y requieren lo mejor de nosotros, alcanzando cada día, paso a paso, una parte de la misma.

La meta de Josías era recuperar el favor de Dios. Por 57 años su abuelo Manasés y su padre Amón se habían encargado de burlarse de Dios, profanando Su Templo, dejándose llevar por cualquier nueva cultura, ídolo o pensamiento que llevó al desenfreno, la idolatría y la apatía espiritual. Su primer paso fue clave: “…comenzó a buscar al Dios de David su padre…” Ordenó sus prioridades, buscó un mentor que lo retará a ser mejor, no se dejó llevar por la ruta más corta, sino que tomó el sendero del trabajo duro y el esfuerzo por mejorar, que lo llevó a cumplir con sus metas.

En 12 años, logró raer de toda su tierra, cualquier vestigio de idolatría. Dios volvía a ser prioridad en el corazón. Logró su objetivo. Su meta se estaba empezando a lograr. Una meta debe ser:
I.  Desafiante, que rompa paradigmas. Que se invierta tiempo, esfuerzo y fe.
II. Específica: No fragmentes tus fuerzas. El enfoque es vital para que una meta logre su cometido. Tras lograr una, sigue con la otra, hasta triunfar.
 III. Con Tiempo de Lograr Resultados: Una meta sin resultados, sin avances, es un sueño. Mide los logros y estima cuánto tiempo tardarás en alcanzarla. 
 IV.  Propia: No debe ser de alguien más, debe ser formulada por nosotros mismo.
V. Relevante: Una meta debe ser importante, que merezca cada esfuerzo, sacrificio y lucha por lograrla.
VI.Debe ser firme: Debe ser capaz de continuar no importando el tiempo, las condiciones y las dificultades.
Una meta es el mapa para lograr alcanzar el propósito de vida. Es la luz que ilumina los senderos. Es el combustible para continuar cuando todo parece imposible. Proponte una meta y todo será más fácil.

b)      Especializarse en lo que se desea alcanzar.
A los dieciocho años de su reinado, después de haber limpiado la tierra y la casa, envió a Safán hijo de Azalía, a Maasías gobernador de la ciudad, y a Joa hijo de Joacaz, canciller, para que reparasen la casa de Jehová su Dios.” 2ª Crónicas 34:8 RVR1960.
 
No puedes querer cazar tigres, si solo has logrado atrapar conejos. Esto es la ley de la especialización. Josías enfocó su propósito de vida en lograr que Dios volviera a ser prioridad dentro de su nación. Buscó a Dios, comenzó a limpiar a Judá y a Jerusalén de los lugares altos, imágenes de Asera, esculturas, e imágenes fundidas, mandó a reparar la casa de Dios, instauró la adoración total y rendición a Dios. No hubo grandes construcciones. No hubo guerras de conquista. Josías se tomó su 31 años de vida en serio y siguió una línea de actuación que no permitía que nada fuera al azar.

Si las marcas que desea alcanzar son académicas, de ser el primero en tu familia en tener una maestría o un doctorado, enfócate en ello. Si desea ser el primero que no cae en las garras del alcohol, promueve en ti el dominio de no caer en la tentación de beber. Si deseas evitar la infidelidad y los divorcios de tu línea sanguínea, trabaja por ordenar tu vida, prestar atención a tu cónyuge, para que sea completamente feliz. El precio a pagar es alto. Pero las recompensas son en gran medida lo mejor.

Publicar un comentario

0 Comentarios