La fe es la chispa que
mantiene viva la llama de la paciencia.
“Dios
empezó el buen trabajo en ustedes, y estoy seguro de que lo irá perfeccionando
hasta el día en que Jesucristo vuelva.” Filipenses 1:6 TLA
Si durante el viaje de la
vida, ha transitado por la oscuridad de los problemas, el dolor de la traición
y el fuego de la prueba, no puede negar que ha tenido la compañía de Dios, experimentado
Su gran Fidelidad y disfrutado Su notable amor.
“Ahora
vamos a Betel, donde edificaré un altar al Dios que respondió a mis oraciones
cuando yo estaba angustiado. Él ha estado conmigo en todos los lugares por
donde anduve».” Génesis 35:3 NTV
La bondad no salva, pero es
una muestra de que lo eres.
“Ahora
bien, alguien podría argumentar: «Algunas personas tienen fe; otras, buenas
acciones». Pero yo les digo: «¿Cómo me mostrarás tu fe si no haces buenas
acciones? Yo les mostraré mi fe con mis buenas acciones».” Santiago 2:18 NTV
La preocupación es terror
al futuro y la amargura es dolor por el pasado.
“Por
lo tanto, ya que estamos rodeados por una enorme multitud de testigos de la vida
de fe, quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que
tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que
Dios nos ha puesto por delante.” Hebreos 12:1 NTV
Avanza. Es una demostración
que tienes fe. Es una evidencia que la llama de tu pasión sigue encendida y que
estás forjando el camino para cumplir con tu llamado.
“Manténganse en el camino que el Señor su Dios les ordenó que siguieran.
Entonces tendrán una vida larga y les irá bien en la tierra donde están a punto
de entrar y que van a poseer.” Deuteronomio 5:33 NTV
Nuestra fe no decide la
respuesta de Dios. La fe nos ayuda a admitir que esa respuesta es lo mejor para
nuestra vida.
“Tres
veces le he pedido a Dios que me quite este sufrimiento, pero Dios me ha contestado: «Mi amor es todo lo que necesitas.
Mi poder se muestra en la debilidad.» Por eso, prefiero sentirme orgulloso de
mi debilidad, para que el poder de Cristo se muestre en mí” 2ª Corintios
12:8-9 TLA
La Ley enfatiza en el
pecado. Su Gracia destaca el perdón. La cruz demostró su Amor. Nuestra culpa es
liberada por su perdón y Su amor nos da una segunda oportunidad.
“El
pecado ya no es más su amo, porque ustedes ya no viven bajo las exigencias de
la ley. En cambio, viven en la libertad de la gracia de Dios. Ahora bien, ¿eso significa que podemos seguir pecando porque la
gracia de Dios nos ha liberado de la ley? ¡Claro que no!” Romanos
6:14-15 NTV
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