“Tres veces le he pedido a Dios que me quite este sufrimiento, pero Dios me ha contestado: «Mi amor es todo lo que necesitas. Mi poder se muestra en la debilidad.» Por eso, prefiero sentirme orgulloso de mi debilidad, para que el poder de Cristo se muestre en mí.” 2ª Corintios 12:8-9
Todas tus decisiones del pasado te trajeron a dónde estás hoy. Esto no te obliga a repetirlas. No te obliga a quejarte por ellas. No te ata a que vivas recordándolas. Simplemente son las experiencias que te pueden ayudar a hacer hoy mejor de lo que fuiste ayer. Son esas semillas que tendrás una cosecha.
“Diviértete, joven, ahora que estás lleno de vida; disfruta de lo bueno ahora que puedes. Déjate llevar por los impulsos de tu corazón y por todo lo que ves, pero recuerda que de todo ello Dios te pedirá cuentas.” Eclesiastés 11:9 DHH
Fe es hacer que las cosas sucedan
“Simón le respondió y dijo: —Maestro, toda la noche hemos trabajado duro y no hemos pescado nada. Pero por tu palabra echaré la red.” Sn. Lucas 5:5 RVR2015
No importa lo que la vida haya hecho contra ti. Lo que importa es lo que tú haces con lo que la vida te pone enfrente.
“Trabajé para ti bajo el sofocante calor del día y en el frío de la noche, sin dormir. Sí, ¡durante veinte años trabajé como un esclavo en tu casa! Trabajé catorce años para ganarme a tus dos hijas y, después, seis años más por tu rebaño. ¡Y cambiaste mi salario diez veces! En realidad, si el Dios de mi padre no hubiera estado de mi parte —el Dios de Abraham y el temible Dios de Isaac—, tú me habrías despedido con las manos vacías. Pero Dios ha visto tu abuso y mi arduo trabajo. ¡Por eso se te apareció anoche y te reprendió!” Génesis 31:40-42 NTV
Un sueño sin planificación genera desgaste, cansancio y frustración. Siéntate para identificar lo que necesitas, prioridades y prever posibles obstáculos a enfrentar. Eso ayudará a tomar las mejores decisiones y lograrás alcanzar mayores distancias con menos recursos.
“Si alguno de ustedes quiere construir una torre, ¿qué es lo primero que hace? Pues se sienta a pensar cuánto va a costarle, para ver si tiene suficiente dinero. Porque si empieza a construir la torre y después no tiene dinero para terminarla, la gente se burlará de él. Todo el mundo le dirá: “¡Qué tonto eres! Empezaste a construir la torre, y ahora no puedes terminarla.” Sn. Lucas 14:28-30 TLA
El amor de Dios es indescifrable. Ama con la intensidad de un enamorado. Con la inocencia de un niño. Con la paciencia de un padre. Con lo inagotable del amor de una madre. Con el gozo de un hermano. Con la pasión de un soñador. No se cansa de soñar. No pone reparos a pesar de nuestra conducta o nuestras malas decisiones. No señala. No impone. No limita. Su amor es inmenso pero no inalcanzable. Es único pero no exclusivo. Describirlo sería solo incrementar su valía y demostrarlo es tan fácil como respirar. Su amor nos sobrepasa. Nos vincula y nos da un sentido. Su amor es inestimable. Para todos. Para ti.
“Estoy convencido de que nada podrá separarnos del amor de Dios: ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los poderes y fuerzas espirituales, ni lo presente, ni lo futuro, 39 ni lo más alto, ni lo más profundo, ni ninguna otra de las cosas creadas por Dios. ¡Nada podrá separarnos del amor que Dios nos ha mostrado en Cristo Jesús nuestro Señor!” Romanos 8:38-39 DHH
La fe se escribe con p: permanencia, paciencia y pasión.
“Luego el hombre le dijo: — ¡Déjame ir, pues ya amanece! —No te dejaré ir a menos que me bendigas —le dijo Jacob.” Génesis 32:26 NTV
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