Manual para Nunca Dejar de Ser Niño

¡Nunca dejes de tener un Corazón como el de un niño! Los niños nos dejan enormes lecciones de vida, nos enseñan a afrontar los problemas, a vencer el miedo, a luchar por nuestros sueños, a despreocuparnos, a jugar limpio, a persistir, a amar. Su enorme sabiduría nos permite entender los grandes secretos para tener una vida mejor y lograr la felicidad que tanto necesitamos. Nuestro Señor Jesucristo nos dejó estás maravillosas palabras, que nos dictan que nunca debemos borrar de nuestra vida y debe ser una necesidad: Ser como un niño: “y dijo: De cierto os digo, que, si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.” Mateo 18:3 

1. Depende al ciento por ciento (100%) de tu Padre Celestial. No te olvides que Él tiene cuidado de nosotros y sabe las cosas que tenemos necesidad. Él sabrá que darnos y que quitarnos. Muchas veces nos dirá NO a nuestros deseos, pero jamás olvidará cubrir TODAS tus necesidades. Dios espera moldear en nosotros su carácter y que cada día seamos mejores personas. 

2. Ama. Como los niños, nunca dudes en regalar una muestra de amor. Abraza, besa, acaricia, di cuánto amas a tus padres, hermanos, esposa(o), hijos, amigos y todos los que están a tu alrededor. La recompensa de amar no consistirá en recibir amor, sino en que jamás te cansarás de regalarlos a otros. 

3. Disfruta de las pequeñas cosas que Dios nos regala. Levanta tu mirada y observa un precioso amanecer, observa la perfección de las filas de hormigas que regresan a su guarida, observa la felicidad de un perro, escucha el cantar de un pajarillo.

4. No pierdas la motivación de ser algo en la vida. Lucha cada día por lograrlo. 

5. Mantente enérgico. Salta. Baila. La vida es muy corta como para perderla con la desesperanza, la amargura y el odio. 

6. Juega. Diviértete, Gózate. Disfruta la vida de tal forma que puedas dar lo mejor de ti y que te cueste irte a la cama, porque estás feliz de hacer lo que más te gusta. Que cada día te encuentre saltando, riendo y dejando tus preocupaciones a tu Padre que está en los cielos. 

7. Lucha por lo que quieres. El 95% de todos los niños no se rinden. Cuando su padre les ha prometido algo, no se cansan de recordarlo hasta que lo reciben. Si tienes un sueño, persiste e insiste hasta que lo conviertas en realidad. Posiblemente, tardará; pero jamás te quedarás triste por no haberlo intentado. 

8. Ayuda a tus amigos siempre. Se esa mano que siempre este atenta a colaborar con el crecimiento de otros. No dejes que la envidia te sature con sus sentimientos destructivos. Comparte siempre y verás como otros compartirán contigo lo poco o lo mucho que tengan. 

9. Llora cuando tengas que hacerlo. Suelta tus cargas y deposítalas en el Único que te puede ayudar. No creas que debes resolver tus problemas por ti mismo. Muestra tus sentimientos, pero no dejes que te dominen. 

10. Admite tus errores y ayuda a que se resuelva. Toma manos a la obra y pide perdón. 

11. Nunca harás las cosas perfectas; pero ¡gózate cuando logres avances! No hay un niño que hable 100% perfecto, que dibuje como un gran pintor, sin embargo, cualquier avance, por pequeño que nos parezca, es una enorme alegría para los pequeños. 

12. No te avergüences de contar un chiste, de hacer una maroma. ¡Canta (aunque los demás pidan que te calles)! Los talentos se encuentran escondidos en donde nadie busca. Recuérdalo. 

13. Trata cada día de parecerte a tu Padre. Recuerda tienes una Hermano Mayor que sabe cómo te sientes, y tienes un Consolador que te muestra el camino de regreso a Casa. 

14. Si tienes dudas, pregunta. Los niños encuentran respuestas para todo, sólo diciendo ¿Por qué? 

15. No pierdas la creatividad. Es un regalo del Cielo, nos hace sentir la misma dicha que el Creador tuvo cada vez que terminó algo en los seis días de la creación. No hace poder decir: ¡Y vio que era bueno! Nunca dejes de ser piloto, cobrador de bus, policía o lo que quieras ser. 

16. Cáete, llora y retoma. No dejes lo bueno que está por venir por la tristeza de lo que pasó ayer. 

17. Nunca olvides mantener tu mirada como la de un niño. Pura y transparente. Que nunca se te olvide que los niños no ven quién es mejor, quién es más pequeño o quién tiene más juguetes. Ellos tratan a todos por igual, juegan igual y disfrutan lo mismo. 

18. Vive cada día con todas tus fuerzas, que cada noche te permita decir: ¡Cómo tengo ganas que sea mañana! 

19. Dibuja siempre una sonrisa en tu rostro. Cuando los demás te ves logras dibujar una en cada uno de ellos. 

20. Persigue lo que quieres con ahínco. Nunca te canses de esperar y siempre celebra cada avance.

21. Nunca dejes de aprender. Lee. Mira. Explora. Analiza. Pregunta. Investiga. Experimenta. 

22. Siempre di la verdad. Aunque cueste. Aunque duela. 

23. Acepta la corrección por fuerte que parezca, por dura que sea, por dolorosa y extenuante que llegue a ser.

24. Honra a tus padres. Que nunca dejen de ser esos héroes que te ayudaron a ser lo que ahora eres. (Hayan participado en tu educación o no). 

25. No pierdas la emoción de salir, divertirte, alcanzar una meta. 

26. Vive la vida con las emociones a flor de piel. 

27. Lánzate por nuevas aventuras, disfruta el recorrido y sorpréndete por el lugar al que has llegado. 

28. No sientas vergüenza de tener las manos sucias por el trabajo realizado. 

29. Reclama las promesas como una realidad. 

30. Jamás de los jamases dejes de vivir amando, confiando y disfrutando lo bueno que tienes en tus manos y deja de pensar un poco en lo que otros tienen.